El individualismo es un término que, en nuestra realidad política y social puertorriqueña, levanta muchas pasiones, porque es relacionado con el egoísmo y considerado ajeno a nuestra cultura. Esta es la caracterización hostil que domina la retórica contemporánea en la isla.
Sin embargo, los resultados de la encuesta El libre mercado en Puerto Rico 2022 del Instituto de Libertad Económica reflejan que, detrás de esa retórica, los puertorriqueños somos individualistas.
El individualismo es una característica definitoria de la modernidad. Previamente, en las sociedades tradicionales, la identidad y posición del individuo estaba dictada por una sola forma de vivir; pero una nueva práctica moral surgió dentro de la civilización occidental creando la raíz principal de la modernidad. Esta raíz es el individualismo -la habilidad del individuo de perseguir sus deseos, sus fines y su identidad moral-.
Los resultados de la encuesta reflejan que la mayoría de los puertorriqueños somos modernos y vemos el valor moral de este individualismo reflejado en el apoyo a la libertad individual y un gobierno limitado. Estos resultados son una prueba de que los puertorriqueños entendemos que, para poder vivir en una sociedad de asociación civil de individuos con diferentes fines, deseos e identidad, el rol del gobierno debe limitarse a mantener un estado de derecho que permita la coexistencia y cooperación de individuos.
Los encuestados resaltaron la importancia de la libertad individual para decidir lo que es mejor para su vida individual y sus circunstancias económicas, escribe Ojel Rodríguez.
Los encuestados resaltaron la importancia de la libertad individual para decidir lo que es mejor para su vida individual y sus circunstancias económicas. Igualmente resaltaron que la realidad del individualismo requiere un gobierno limitado, que deposite confianza en la habilidad de los puertorriqueños de manejar sus propios asuntos.
El apoyo al individualismo en la encuesta, no obstante, solo se refleja dentro de un marco teórico e individual y no de política pública. Los resultados revelan un pensamiento muy latente en nuestra cultura política, que podemos resumir en la frase: el gobierno debe actuar, es decir, la tendencia a hacer de cualquier problema uno social y querer buscar una solución política por parte del Estado. En las áreas relacionadas con la economía, la mayoría de los encuestados ve al libre mercado como el actor principal; pero, en muchas otras áreas, favorece una responsabilidad mixta del libre mercado y el gobierno, denotando resistencia a extrapolar la lógica individualista a la política pública.
Este es el mayor reto que revela la encuesta, porque las bases teóricas y de vida individualistas están presentes, pero limitadas en el ámbito de políticas gubernamentales. Existe la esperanza equivocada de que, si el gobierno actúa en muchas de estas áreas, el resultado sería positivo para la isla. Sin embargo, como el expresidente Ronald Reagan expresó en su juramentación: “El gobierno no es la solución de nuestro problema, el gobierno es el problema”.
Las soluciones no están en la mano de burócratas iluminados, sino en los individuos que persiguen sus deseos dentro de un estado de reglas y normas. Esta encuesta resalta la necesidad de fundamentar esa base individualista puertorriqueña con una práctica del individualismo en la política pública.
Esta pieza fue publicada originalmente en El Nuevo Dia